El Centro de Día de la Fundación Jesús Abandonado no cierra sus puertas durante los meses de verano, es más, se encuentra al 93 por ciento de capacidad durante el verano. El objetivo del centro, según cuenta su director Daniel López, es el de ser un espacio de acogida «que cubra no sólo las necesidades más elementales, sino dar una atención integral digna junto al resto de servicios de esta institución». En el primer semestre del año 2016 atendieron a un total de 83 personas.