La Audiencia Provincial confirma la sentencia de un juzgado de lo penal que en 2014 condenó a un hombre que sustrajo un ordenador por un delito de robo y a quien se lo compró por uno de receptación. La sentencia condenó al primero a un año de prisión tras aplicarle la agravante de reincidencia y la atenuante de drogadicción. El comprador fue condenado a ocho meses de prisión, tras lo que presentó un recurso de apelación. Al desestimarlo, se respalda el relato de hechos probados que dice que el autor del robo entró en una clínica odontológica de Alcantarilla y se apoderó del ordenador. efe