La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado una banda radicada en Barcelona que se dedicaba a cometer estafas mediante falsos anuncios de alquiler de viviendas en zonas de turismo que publicaba en Internet.

En la operación conjunta de ambos cuerpos policiales han sido detenidas 24 personas en Murcia, Barcelona, Tarragona y Madrid, que ejercían la labor de intermediarios, y el jefe de la trama, que fue arrestado en Bélgica.

Según han informado la Policía Nacional y la Guardia Civil, a los detenidos se les atribuyen 237 estafas que cometían publicando ofertas falsas de arrendamiento de apartamentos y pisos vacacionales en varios portales de Internet y solicitando distintas cantidades en concepto de reserva de los inmuebles.

La operación comenzó en el año 2014, cuando los investigadores tuvieron conocimiento de una posible trama de estafas en el alquiler de viviendas de interés turístico, tanto en zonas del Pirineo aragonés como en la costa mediterránea. Al tener ambos cuerpos policiales objetivos comunes se determinó llevar a cabo las indagaciones de manera conjunta.

La organización, que tenía su base en Barcelona y su área metropolitana y la cúpula en Bruselas, publicaba anuncios de pisos turísticos en varias páginas web, y cuando las personas interesadas contactaban pensando que era con los propietarios, les exigían el pago de una cantidad de dinero en concepto de reserva.

Las estafas se destapaban cuando los inquilinos llegaban al apartamento alquilado y comprobaban que no existía o ya se encontraba ocupado por otras personas.

Los agentes comenzaron entonces a vigilar la publicación de anuncios y controlaron la documentación y las transacciones financieras. Así, identificaron a 88 estafados y arrestaron a cuatro integrantes del grupo en las localidades de El Vendrell (Tarragona), L´Hospitalet de Llobregat (Barcelona) y Barcelona.

Avanzadas las pesquisas, los investigadores identificaron otras 149 estafas y detuvieron a 20 personas más en diversos puntos de la geografía española.

A comienzos de este año, los investigadores detectaron nuevos fraudes con un ´modus operandi´ similar, lo que les hizo sospechar que se tratara de la misma organización ya investigada.

Los agentes pudieron ubicar que el lugar de residencia del cabecilla de la banda estaba fuera de España: en Bélgica.

Según la Policía, una de las argucias que utilizaba para efectuar las estafas era realizar cambios de última hora en la identidad de la persona que iba a recibir el dinero de la reserva concertada.

Este hecho hacía sospechar a los clientes que consultaban la identidad del arrendador y descubrían que se trataba de un engaño.

Los agentes descubrieron también un foro de afectados en el que los propios estafados colgaban vídeos recriminando al autor de la estafa los hechos y éste último mofándose de sus víctimas.

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on esta información, y tras emitir por parte del juzgado una comisión rogatoria a las autoridades belgas, el pasado día 26 de mayo la policía belga detuvo al supuesto cabecilla de la organización, sobre el que pesaba una orden de detención europea.