El concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta, Antonio Navarro Corchón, se reunió ayer con el presidente de la Asociación de Bares de Murcia (ASBAMUR), Jesús Belmonte, para seguir concienciando a los murcianos de los problemas acústicos y «planificar todas las medidas y eventos que vamos a realizar de cara a septiembre para seguir avanzando en cuanto a la ordenanza del ruido, los limitadores acústicos y el horario de cierre de los locales», afirmó este último tras la reunión con el concejal.

Ambos coincidieron en la importancia de una colaboración conjunta para mejorar la situación acústica de Murcia y conseguir así que se respete el descanso de todos los vecinos por parte de los usuarios y propietarios de los locales de ocio.

«Desde la implantación de la actual ordenanza, y con ello el uso de los limitadores del ruido, están descendiendo muy notablemente el número de quejas y denuncias vecinales, por lo que estamos muy contentos con estos datos y vamos a seguir trabajando para que sigua así e incluso mejore», comunicó Jesús Belmonte.

Dicha ordenanza establece que estos locales deben respetar el limite acústico, que para los bares está establecido en 95 decibelios y para las discotecas en 105, dependiendo también del aislamiento de dichos locales, y de no ser así se llevaría a cabo una inspección con la correspondiente multa si se diera el caso de incumplimiento.

Así mismo, el concejal de Urbanismo adelantó que en el próximo mes de septiembre se constituirá el Consejo Sectorial del Ruido, donde comenzarán los trabajos de control acústico en determinados puntos de la ciudad, también llamado «mapa de ruido», el análisis y tratamiento de los datos obtenidos, y la elaboración de la cartografía acústica asociada al ruido de actividades de ocio. Todo ello para «seguir garantizando que todos los murcianos disfruten de su tiempo de ocio y su descanso y que haya consonancia entre ambos aspectos», tal y como aseguró el presidente de ASBAMUR.