El Palacio Almudí, enclave profundamente ligado a la historia de Murcia, fue hace unos días escenario de la primera Jornada de Participación Vecinal. Inicialmente se configuró como una cita con la que los miembros del Equipo de Gobierno queríamos rendir cuentas de la gestión llevada a cabo en este primer año. Pero eso fue sólo el objetivo que nos planteamos en un primer momento porque, después, como tantas veces sucede, la realidad superó las expectativas.

Siempre hemos tenido claro que la razón de ser de nuestra labor pública son los murcianos. Los ciudadanos nos eligieron para hacer y ese es nuestro compromiso. Pero ni queremos, ni sabemos ni pretendemos hacerlo solos. No es una forma de proceder que nos guste y no es el estilo que queremos. El 13 de junio de 2015 firmamos un contrato social con todos los murcianos. Con quienes votaron al Partido Popular y con quienes no lo hicieron. Su vigencia no es de cuatro años. Queremos rendir cuentas año a año porque es nuestro deber y los murcianos lo merecen. Porque sabemos que no hay nada más importante de Murcia que los murcianos y las murcianas. Son el centro de la actividad pública y, juntos, tenemos la oportunidad de desarrollar nuestro proyecto de ciudad. Un proyecto colectivo y participativo en el que cabemos las miles de personas que compartimos un sentimiento de pertenencia a Murcia.

Un proyecto que nos une porque nuestro objetivo es transformar nuestros barrios y pedanías llevando a cabo un modelo construido entre todos. Durante este primer año hemos hecho un importante esfuerzo para desarrollar actuaciones de mayor o menor relevancia, pero todas ellas dirigidas a mejorar nuestro municipio y la calidad de vida que nos ofrece. Más de 700 personas asistieron a la Jornada de Participación Vecinal para intervenir en los diferentes actos que tuvieron lugar, siendo testigos de la primera Junta de Gobierno Abierta, participando en las mesas sectoriales, escuchando la intervención del Alcalde o el posterior coloquio. Por la tarde, reservamos la sesión para mantener encuentros directos y personales con quienes quisieron plantearnos cuestiones de su interés. En mi condición de Portavoz del Equipo de Gobierno, y en nombre de quienes lo integramos, quiero transmitir nuestro más profundo agradecimiento a todas las personas que compartieron esos momentos con nosotros, haciéndonos llegar multitud de propuestas e ideas y, por supuesto, las quejas que consideraron conveniente. Lejos de algunas opiniones que hemos escuchado en estos días por parte de concejales de otras formaciones políticas, nosotros creemos firmemente que la gestión pública sólo se puede ejercer con la participación de los ciudadanos y cualquier iniciativa que vaya en sentido tiene que ser bienvenida. Nuestro plan es compartido con todos los murcianos. Es vivo y dinámico, preparado para recibir las mejores ideas.

Y está basado en la personalidad de las gentes de esta tierra, sin imposiciones ni imposturas. Nos disponemos a hacerlo realidad con ilusión y con la responsabilidad derivada de la confianza que los murcianos depositaron en nosotros. Con todo, lo más importante no es lo que hemos hecho, sino lo que nos queda por hacer. Seguiremos trabajando con una actitud y un talante abierto, conciliador, dialogante y participativo. Seguiremos buscando el mejor acuerdo para avanzar y progresar. Tenemos mucho por hacer pero, juntos, será más fácil.