Los delegados sindicales de los funcionarios del Ayuntamiento van a parar sus protestas por el convenio colectivo durante una semana, tras prometerles ayer el alcalde José Ballesta que convocará una mesa de negociación la próxima semana en la que estudiará sus reivindicaciones y cumplir las que se puedan «dentro de la legalidad». Para lograr que los recibiera el primer edil se encerraron ayer durante un par de horas en la Alcaldía.

Desde la una hasta las tres y cuarto de la tarde estuvieron esperando para pedir la intervención directa de Ballesta «tras el estancamiento de las negociaciones, después de meses de infructuosas conversaciones con la concejalía de Personal», aseguraban fuentes sindicales. Antes de hablar cara a cara con el alcalde les atendió el concejal de Modernización de la Administración, Calidad Urbana y Participación, Pepe Guillén.