El Museo Ramón Gaya tiene desde hace casi 25 años la misma plantilla, que trabaja para una empresa privada cuyo contrato depende del Ayuntamiento. El Gobierno local y los grupos de oposición acordaron ayer intentar buscar una fórmula que permita regularizar la situación de estos empleados, que la concejala del PSOE Begoña García Retegui calificó de «alegal» tras la reunión del Patronato del Museo Ramón Gaya, que tenía en el orden del día iniciar los trámites para realizar un nuevo contrato.
Tanto Retegui como la concejala y portavoz de Ahora Murcia, Alicia Morales, se mostraron partidarias de que la Administración local se ponga manos a la obra para acabar «con las cosas que se han hecho mal hasta ahora», en palabras de la concejala socialista.
Begoña García Retegui añadió que incluso a la arcas municipales podría salirle más económico regularizar a estos trabajadores, que si fueran a los tribunales y denunciaran les harían fijos, que seguir contratando una empresa externa.
