La Biblioteca Regional, que da servicio a miles de usuarios al año y con un nivel de satisfacción muy elevado, quedará malherida si finalmente nadie lo remedia, o más bien si la Asamblea Regional no modifica los presupuestos de la Comunidad Autónoma aprobados para 2016, que recogen una disminución de los fondos destinados a este servicio.

Los que también quedarán mal parados serán los 17 trabajadores que llevan años empleados en este edificio y que perderán su empleo si por esos recortes se cierra los sábados por la tarde, además de no poder dar servicio durante festivos y vacaciones de verano, Semana Santa o Fiesta de Primavera.

Rebeca Gallego, representante de esta plantilla contratada por una empresa externa (los funcionarios trabajan en la Biblioteca Regional de lunes a viernes y algunos sábados por la mañana) explicó ayer a esta Redacción que el contrato que está en vigor caducará el próximo mes de mayo, sin que, de momento, se tenga previsto la prórroga.

«Morimos poco a poco. En 2012 ya se decreóo el cierre de los domingos por la mañana, lo que supuso una rebaja de las jornadas de trabajo, con el consiguiente recorte de suelo, y el despido de un guarda de seguridad y de dos limpiadores», apuntó la representante de los trabajadores, que tienen previsto pedir reuniones con la consejera de Cultura, Noelia Arroyo, y con los grupos políticos, además de hacer una recogida de firmas. Fuentes de la Comunidad indicaron que el PP se está planteando presentar una moción al pleno de la Asamblea Regional con el fin de corregir la merma de fondos, derivada, al parecer, de las enmiendas presentadas por la oposición.