La patronal de las empresas dedicadas a elaboración de los proyectos de ingeniería ha puesto el grito en el cielo ante la baja del 60% que ha admitido Adif en el contrato de la asistencia técnica para el diseño de la entrada del AVE a Murcia.

El Foro para la Ingeniería de Excelencia (Fidex), del que forman parte las grandes compañías, entre las cuales figura Acciona Ingeniería o Técnicas Reunidas, considera «escandalosa» la adjudicación por unos 455.000 euros de un contrato que salió a licitación en 1,1 millones. El director general de Fidex, Fernando Argüello, asegura que por el precio formalizado «no se pueden realizar los sondeos y las catas necesarias para conocer el terreno por el que discurrirá un túnel de siete kilómetros».

Fernando Argüello sostiene que la rebaja, lejos de suponer ventaja alguna, causará innumerables inconvenientes que, a la hora de ejecutar las obras, acabarán encareciendo los trabajos hasta en un 20%. Recordó igualmente que las catas son necesarias para conocer las condiciones del terreno y determinar las medidas de seguridad que es preciso tener en cuenta en cada tramo. «Cuando empiecen la obra se van a encontrar con todo tipo de sorpresas», auguró.

También fue adjudicado en mayo de 2015 con una baja semejante la llegada del AVE a la estación de El Carmen, que había salido a concurso en 82 millones y se adjudicó en 38.

Sus críticas se dirigen en concreto contra la adjudicación del contrato de asistencia técnica para la elaboración del proyecto de soterramiento del AVE, que debía diseñar «el túnel de siete kilómetros» por el que discurrirá la Alta Velocidad, unos tramos en trinchera y otros bajo tierra. Por eso, «considera alarmante que Adif adjudique sus proyectos a la empresa que presenta la oferta más barata».

A juicio de Argüello, si no se tiene la información suficiente sobre el suelo, la constructora se encuentra después con situaciones imprevistas que le obligan a utilizar maquinaria que no había previsto, con el consiguiente retraso en la ejecución. Destacó que, a pesar de los ahorros que se intenta conseguir en este tipo de adjudicaciones, «la redacción del proyecto supone apenas el 4% o el 5% del coste total», por lo que una baja temeraria no aporta una cantidad significativa.

El representante de la patronal asegura que esta asociación representa el 50% de todas las empresas dedicadas a la ingeniería, que suman unos 3.000 millones de facturación al año.

Fernando Argüello se lamentó de que, en esta situación, las empresas dedicadas a la ingeniería no tienen más remedio que marcharse a trabajar fuera de España, porque los presupuestos de adjudicación son insostenibles. «La otra alternativa es despedir a la plantilla y cerrar», apuntó.