La Junta de Gobierno del ayuntamiento de Murcia aprobó ayer la ejecución del proyecto 'Ciberaula. Quedamos al salir de clase', que tiene por objeto facilitar recursos y actividades lúdico-educativas, así como la incorporación de las tecnologías de la comunicación y la información en centros que puedan atender en horario extraescolar a 150 menores de familias y colectivos frágiles con problemas de conciliación de la vida familiar y laboral.

Así lo explicó la portavoz del Grupo Popular y concejala de Juventud, Rebeca Pérez, quien destacó que este programa, que depende de la concejalía de Derechos Sociales, que dirige Conchita Ruiz Caballero, se realizará en un periodo de dos años, por un importe de 120.000 euros, y va dirigido a menores de entre 6 y 12 años con menos oportunidades de los barrios y pedanías del ámbito de actuación de los Centros de Servicios Sociales. Las aulas están ubicadas en el Centro de Servicios Sociales de Espinardo, el Centro Cultural de Los Dolores y en el local de 'La Innovadora' de San Pío X, según informaron fuentes del Consistorio en un comunicado. A través del conocimiento de nociones de informática, fomento de la lectura y actividades lúdico educativas, se ofrece un espacio de conocimientos donde poder explorar, analizar, intercambiar y presentar la información, a la vez que se les facilita el acceso a herramientas imprescindibles en el momento actual. El proyecto, que cuenta con la colaboración de la Fundación La Caixa, también pretende propiciar un marco de desarrollo integral de los menores y el uso adecuado del tiempo libre, además de facilitar su integración en el medio social a través de actividades lúdico-educativas en horario extraescolar y periodos vacacionales que se desarrollan en la Ciberaula. El horario de la misma será de lunes a viernes, de cuatro a ocho de la tarde. No obstante, en el periodo vacacional de Navidad, Semana Santa y Fiestas de Primavera, el horario se adaptará según programación.

Detección y prevención

Ciberaula es «un recurso idóneo para la detección y prevención de un importante número de problemáticas sociales y educativas que conciernen la población infantil del municipio y un soporte imprescindible para apoyar la intervención socioeducativa con los menores en el abordaje de problemáticas como el absentismo o el fracaso escolar, la integración social, etc.», tal y como destacó Pérez.

Al mismo tiempo, es un medio para abordar contenidos transversales, como la igualdad de género o el medio ambiente, dando un sentido educativo al ocio y al tiempo libre, y a la formación en el uso adecuado de las nuevas tecnologías, previniendo graves problemas que un uso inadecuado de las mismas origina a muchos menores, como el ciberacoso.