Tras la tempestad llega una cautelosa calma a la espera de que se resuelvan los acontecimientos. El «alarmismo» y la «sorpresa» con los que las organizaciones de la enseñanza concertada de la Región acogieron la enmienda que aprobaba un recorte de tres millones en la partida de los colegios concertados se tornó ayer en una serie de reivindicaciones que ya han sido escuchadas y «garantizadas» por los líderes de Ciudadanos -que propuso la enmienda- y del Partido Socialista.

Tanto el portavoz parlamentario del PSOE, González Tovar, como el portavoz de C's, Miguel Sánchez, mostraron su apoyo a «la defensa» de la concertada y argumentaron que el crecimiento consignado (fijado en 5 millones, al reducir los 8 millones iniciales) sería «suficiente» para atender las demandas de la concertada, según avanzó ayer el presidente de Ucoerm (Unión de Cooperativas de Enseñanza), Juan Antonio Pedreño, quien mantuvo conversaciones con Tovar y Sánchez.

Así lo afirmó Pedreño en una rueda de prensa en la que participaron conjuntamente el secretario general de Escuelas Católicas de España, José María Alvira, y la presidenta murciana de la misma, Alicia Plaza; así como el presidente de Asociación de Centros para la Educación Privada de Murcia (CECE), José Francisco Parra. Plantearon un manifiesto con cinco compromisos: el mantenimiento de los conciertos educativos en la Región; el mantenimiento del crecimiento vegetativo y del convenio de concertabilidad para los próximos años; el incremento del 1% del salario de los trabajadores de la concertada, la devolución del 33,5% de la paga extra, «igual que los funcionarios de la escuela pública» -agregó Pedreño- y que se destine el dinero para apoyos y las aulas abiertas de cara a los «escolares que lo necesiten».

«No sabemos si estos cinco puntos suponen cinco millones, seis u ocho; lo desconocemos, pero sí consideramos que son indispensables», declaró el presidente de Ucoerm antes de matizar: «Sin saber la cifra exacta, creemos que nuestras propuestas están más cerca de los ocho millones que de los cinco». Por eso, «queremos que evalúen el costo de la propuesta real para el funcionamiento de la concertada en la Región». Y zanjó: «Si cualquiera de estos puntos no se cumplieran, entraríamos en las variables de cierres de aulas, despidos de profesores, traslados de alumnos y padres que no pueden acceder a los centros».

Hasta el próximo martes se pueden presentar correcciones a las enmiendas de los presupuestos.

"Si es necesario, salimos a la calle"

El presidente de Concapa (Confederación Católica de Padres de Alumnos), Víctor Escavy, presente en el acto, dijo que los padres de la concertada «no se caracterizan» por salir a la calle y manifestarse, sino «por dialogar»: «Pero si es necesario, lo haremos», avisó. «No queremos que esos tres millones tengamos que ponerlos de nuestros bolsillos», zanjó.