La consejería de Sanidad deberá pagar indemnizaciones que suman 84.500 euros a la viuda e hijos de un paciente por la falta de diligencia de los servicios médicos a la hora de diagnosticar el cáncer de vejiga que padecía. Así lo dispone una sentencia dictada por la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) y que estima en parte el recurso que presentaron los familiares del fallecido. La sentencia, que tiene como ponente al magistrado Indalecio Cassinello, fija esa cantidad, frente a los 680.000 euros reclamados por los demandantes, porque «nos encontramos ante un retraso diagnóstico y no ante una muerte directamente imputable a la administración sanitaria». En su demanda, los familiares del paciente, que murió cuando contaba 47 años de edad, consideraron que los servicios médicos no habían funcionado correctamente, al retrasarse en diagnosticar el cáncer.

En cuanto a las indemnizaciones que reclamaron, expusieron que las mismas correspondían a la pérdida de oportunidad diagnóstica y terapéutica padecidas por el enfermo, lo que había conllevado «el sufrimiento de una cirugía mucho más agresiva y mutiladora de la que se hubiera indicado meses antes».