Ahora Murcia informó ayer a Alcaldía de un nuevo episodio en el proceso de deterioro del Puente Viejo, consistente en el desprendimiento de trozos de sus sillares, según informaron fuentes de esta formación política en un comunicado. Esta vez, Ahora Murcia critica que la situación es «todavía más grave», ya que «no solo se trata del estado de este importantísimo bien patrimonial, sino que además conlleva un peligro para las personas que utilizan el camino peatonal junto a la margen del río o para quienes realizan actividades acuáticas en él, algo que el Ayuntamiento está promoviendo estas fiestas».

Junto a la caída de grandes fragmentos, Ahora Murcia critica que se puede contemplar en el puente una gran grieta, además del mal estado visible debajo del pedestal de una de las farolas. Además, lamenta que en los últimos días han sido colocados nuevos maceteros en las farolas decimonónicas protegidas del puente.

El grupo municipal denunció públicamente el pasado 18 de agosto a la concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta la presencia de elementos «agresivos» en el puente y solicitó que se procediera a estudiar de forma integral su estado y conservación, de cara a su rehabilitación.

Poco después el Gobierno regional anunció el inicio de la tramitación de la histórica infraestructura como Bien de Interés Cultural (BIC), «pero los hechos demuestran que no solo no se están dando pasos en favor del cuidado y protección del puente, sino que, al contrario, los motivos de alarma y deterioro se multiplican hasta límites insospechados», señaló ayer la edil de Ahora Murcia Angeles Micol. Asimismo, explicó que «la necesidad de protección del Puente Viejo se justifica en su alto valor histórico y cultural, pero también en que es una infraestructura muy utilizada por vehículos y peatones».