­El rector de la Universidad de Murcia (UMU), José Orihuela, insititó ayer en que la institución se encuentra en «una situación financiera crítica», según explicó durante la firma de la cesión de un terreno de el Ayuntamiento a la UMU para ampliar el campus de Ciencias de la Salud.

Para el rector, la universidad tiene dos problemas fundamentales. En primer lugar la entidad está «intrafinanciada por el gasto del personal», del que no se pueden hacer cargo, además de que su horario y volumen «no es el adecuado». Por otro lado, considera que el organigrama docente no es bueno ya que hay una gran bolsa de profesores asociados. Estos docentes tienen un horario parcial en el que combinan investigación con trabajo de profesorado, algo que parece no gustar a Orihuela, ya que llevará a la universidad de «camino a la quiebra institucional», afirmó.

«La universidad podía llegar a un estado en el que no podrá atender a todas las titulaciones o servicios que ofrece» debido a que «simplemente el personal no es el más adecuado para hacerlo, ni hay suficiente para que sea así», subrayó el rector.

«Hay un desfase estructural muy grande» en la plantilla docente asociada y en profesorado «que hay que modificar», sentenció el rector.

El pasado 13 de agosto, Orihuela manifestó la necesidad de aumentar el presupuesto general para solventar el problema de personal y que la institución solo tiene dinero para poder pasar los cuatro meses que quedan de año.