Agentes de la Policía Nacional detuvieron a dos personas como presuntos autores de un delito de asesinato en grado de tentativa y un delito de tráfico de estupefacientes respectivamente.
Según han explicado fuentes policiales, los hechos tuvieron lugar a finales del pasado mes de julio, a media mañana, cuando un varón de 18 años de edad se refugió en un bar de la carretera de Alicante solicitando auxilio por las graves heridas de arma blanca que presentaba en tórax, espalda y brazo. Tras llamar a los servicios de emergencia y por la gravedad de sus heridas, el joven fue trasladado al Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca.
Se inició una investigación donde el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Murcia averiguó que la víctima se dedicaba a vender sustancias estupefacientes en un domicilio alquilado por la organización para la que trabajaba.
El día de la agresión se presentó en su vivienda un individuo, quien sin mediar palabra le apuñaló por la espalda y tras una pelea, en la que resultó herido en tórax y brazo, consiguió evadirse de su agresor y esconderse en el local público donde posteriormente pudo ser asistido por un vehículo policial y una ambulancia.
Tras la toma de declaración del agredido, los agentes policiales siguieron la pista de dos individuos: uno de ellos, jefe de la víctima, varón de nacionalidad española de 46 años de edad, que fue detenido por su implicación en el suministro y venta de drogas. El otro, un varón italiano también de 46 años, conocido del primero, que quedó detenido por su presunta autoría sobre esta agresión; un asesinato en grado de tentativa por la gravedad de las heridas ocasionadas, las zonas corporales afectadas y la premeditación.
Analizan la sangre de la ropa
- El registro e inspección llevados a cabo de manera conjunta por el Grupo de Homicidios y la Brigada Provincial de Policía Científica en un domicilio de Santiago y Zaraiche permitió recuperar algunas prendas manchadas en sangre, las cuales están siendo objeto de estudio científico por los Laboratorios de Análisis Químicos de la Dirección General de la Policía.
La víctima fue imputada, no detenida, por un delito contra la salud pública por la venta de sustancias estupefacientes, según han explicado las mismas fuentes en un comunicado de prensa.
La investigación e intervención ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial, contando con la colaboración de la Brigada Provincial de Policía Científica, todos ellos pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Murcia
