El Puente de los Peligros, uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad de Murcia, cumplirá 275 años el próximo 15 de agosto. No se trata de una fecha orientativa, sino que lo indica una placa conmemorativa ubicada en el interior de uno de los arcos y que no había sido descubierta hasta ahora.

Concretamente, la inscripción se encuentra grabada en la piedra clave de la bóveda septentrional del puente, una pieza esencial para la conclusión de este tipo de obras y que suele servir como símbolo, en la que se puede leer «DIA DE NVESTRA SEÑORA DE LA ASVNCION SE PVSO LA VLTIMA PIEDRA AÑO DE 1740». Indicación que señala el 15 de este mes, en concordancia con la importante festividad, del año 1740.

El descubrimiento fue presentado ayer a los medios por el alcalde de Murcia, José Ballesta, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Miguel Ángel Ródenas. En el encuentro, se explicó cómo visualizaron la inscripción gracias a las labores de prevención indicadas antes de realizar el dragado del río. El mensaje no había sido observado hasta ahora, pese a encontrarse en un sitio muy visible. Su localización se encuentra encima de uno de los laterales del río, el cual puede ser transitado por el ciudadano.

En este sentido, Ballesta indicó la importancia de realizar «nuevos descubrimientos históricos» en sitios tan característicos de la ciudad como es el Puente Viejo. El alcalde consideró que «los restos históricos son el sustento y futuro de Murcia», además de proporcionar «raíces y alas para levantar Murcia»; también aprovechó la oportunidad para promocionar el proyecto Murcia Río, enmarcado dentro de las propuestas del Ayuntamiento para esta legislatura. La intención de este plan es proporcionar lugares de ocio para niños y mayores alrededor del Segura. Según sus palabras, al igual que en el antiguo Egipto, la ciudad debe orientarse al río, como con el Nilo.

Por otra parte, Miguel Ángel Ródenas recordó las labores de recuperación que se han llevado a cabo en el Segura desde 1995. Los procesos de saneamiento han consistido durante estos años en la extracción de los vertidos, la instalación de cien depuradoras y los trabajos para expulsar especies invasoras a lo largo de todo el cauce. Para el presidente del organismo de cuenca, el Segura «ahora es un río» y «tiene vida».

Ballesta completó su discurso indicando que la cuenca pasará de ser «un elemento de división» a uno de «unión».

Se trata de una inscripción en la bóveda de uno de los arcos del Puente de los Peligros, donde se puede leer «DIA DE NVESTRA SEÑORA DE LA ASVNCION SE PVSO LA VLTIMA PIEDRA AÑO DE 1740». Lo que indica que un día tan señalado en el calendario cristiano como es el de Nuestra señora de la Asunción ­-15 de agosto-, fue el momento en el que terminó la construcción de los arcos del puente. El grabado se encuentra situado en la clave -la piedra central del arco-, que fue colocada por orden del director de la obra en esa fecha, Jaime Bort. El mensaje está escrito en letra capital cuadrada con los signos y abreviaturas propias de la época, está grabada sobre dos losas consecutivas de 0,84 y 0,73 metros de longitud, respectivamente, con 0,41 metros de altura.