Ha vuelto a ocurrir. Ayer por la tarde aparecieron once palomas muertas en el Puente de Hierro, tal y como ocurriera hace casi un año, aunque en aquella ocasión la situación fue más alarmante, ya que más de cien palomas se encontraron en el suelo de varios lugares -plaza de Santo Domingo, la Glorieta y el puente Manterola-. Sobre las cinco y media de la tarde, la Policía Local y los servicios sanitarios municipales fueron alertados por varios viandantes, sorprendidos de ver a estas aves en el suelo del puente, así como a un par de ellas en la mota del río.

Según confirmó a LA OPINIÓN la concejala de Sanidad, María del Carmen Pelegrín, técnicos de Zoonosis procedieron a la retirada de las aves para poder realizarles varios análisis y saber las causas de su muerte. Dentro de unos días los resultados de esos análisis reflejarán qué es lo que ha podido ocurrir. Aunque, sin confirmación oficial, podría tratarse de un envenenamiento, tal y como ocurrió hace un año. Entonces, los técnicos encargados de realizar los análisis aseguraron que la sustancia utilizada para envenenar a las palomas fue un pesticida agrícola.