La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Murcia, presidida por el magistrado Abdón Díaz, decidió ayer suspender el juicio contra T.R., acusado de asaltar en febrero de 2012 a tres ancianas en un carril aledaño a un huerto de limoneros de la pedanía de El Raal y de golpear con una rama a las tres víctimas con el fin de robarles, provocando la muerte de una de ellas.

El motivo de esta suspensión -es la segunda vez que se aplaza la vista oral por el mismo motivo-, solicitada por el Ministerio Fiscal, ha sido la falta de un testigo «de gran importancia» para esclarecer los hechos, según indicaron todas las partes. Así, la propuesta fue apoyada tanto por la acusación particular como por la defensa.

El fiscal José María Alcázar ha solicitado a la Audiencia Provincial de Murcia que gestione la colaboración con el Reino de Marruecos para localizar a este testigo, que en la instrucción del caso aseguró haber visto huyendo al acusado instantes después de los hechos. Durante su intervención, el representante del Ministerio Público manifestó que el testimonio de esta persona, que supuestamente se encuentra en Casablanca (Marruecos), es fundamental para esclarecer lo ocurrido el 27 de octubre de 2012. Por ello, ha pedido que, en caso de localizarlo, el testigo declare por videoconferencia desde su país «con la colaboración de magistrados de enlace» el mismo día que se celebre la vista oral en Murcia.

Posteriormente, a preguntas de los medios, el fiscal explicó que la declaración del testigo es una prueba de cargo «fundamental» pero que éste tiene «la prohibición de salir de Marruecos, impuesta por Francia, para regresar a un país de la Comunidad Europea hasta 2016», pero «no se trata de esperar hasta entonces, sino de habilitar la asistencia judicial internacional». Por su parte, el abogado del acusado, Felipe Insúa, que confía en que el testigo sea localizado y la videoconferencia se realice en cuestión de un mes, aseguró que este testigo «es el único que existe tanto para la acusación como para la defensa como posible conocedor de los hechos», y se encontraba anteriormente en paradero desconocido. El letrado añadió que su cliente defiende su inocencia «desde el primer día que fue detenido» y después «del tiempo transcurrido en prisión, nunca ha cambiado su versión». Cabe recordar que el Ministerio Fiscal solicita 44 años de cárcel para T.R., según se recoge en las conclusiones provisionales del fiscal, para quien los hechos son constitutivos de un delito de asesinato consumado por el que procede imponerle la pena de 20 años de prisión; así como de un delito de asesinato en grado de tentativa por el que procede imponerle las penas de 14 años de cárcel; un delito de lesiones por el que procede imponerle cinco años de prisión; y un delito de robo con violencia por el que pide otros cinco años de cárcel.