Sin duda, uno de los mejores planes para el último día de las Fiestas de Primavera es pasar la mañana tomando el aperitivo en las calles del centro de la ciudad recogiendo los típicos regalos y disfrutando del ritmo festivo de charanga, batucada y pasodoble de los grupos sardineros en las horas previas al desfile del Entierro de la Sardina. Y eso hicieron ayer miles de murcianos y visitantes que quisieron aprovechar al máximo el ya conocido como 'Entierro mañanero'.

Con un sol espléndido y un calor que hacía «que parezca que estemos en pleno agosto», como comentaba encantado Alberto Insa, un vecino de El Palmar que seguía las evoluciones de los grupos sardineros acompañado por su mujer y sus tres hijos, las comparsas sardineras repetían una y otra vez sus paseos desde la plaza del Cardenal Belluga hasta la Redonda, con el epicentro establecido en el paseo de Alfonso X el Sabio, repartiendo con alegría pequeños obsequios, entre los que no faltaron los ya clásicos pitos, juguetes de toda clase, los picantes tangas y collares o pendientes de bisutería. Todo para un entregado público que no se cortaba en pedir su parte del pastel.

El mágico pasacalles se hizo grande con el desfile de Doña Sardina, que repitió el mismo recorrido a la una de la tarde. Los sardineros desfilaron exultantes, mientras todas las miradas se centraban en las bellas 'majorettes' de cuerpos esculturales procedentes de Hungría y Polonia. Los tambores de las batucadas ponían un soniquete marchoso que hacía que grandes y mayores no pararan de mover sus cuerpos en un día en el que los prejuicios y las malas sensaciones se quedan en casa.

La actriz Marta Nieto, Doña Sardina, y Xuso Jones, Gran Pez 2014, no pararon de recibir felicitaciones y abrazos de la gente en los prolegómenos del famoso y multitudinario desfile nocturno, en el que también fueron protagonistas. Mientras, los bares y restaurantes del centro hacían su 'agosto' entre la euforia de los turistas y murcianos con el ambiente festivo que se crea y con los pitos sardineros de fondo.