La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJRM) no ha considerado probado que una mujer que fue sorprendida por inspectores de la Seguridad Social sirviendo, vestida con un delantal, a los clientes de un restaurante trabajara realmente en el mismo.

La sentencia considera que todo pudo ser un servicio ocasional y prestado como un favor a la propietaria del establecimiento, ubicado en Sangonera la Verde, que había salido momentáneamente para resolver una cuestión en su casa, ubicada en la inmediaciones.

La sentencia desestima así el recurso que la Inspección Provincial de Trabajo presentó contra la resolución de un Juzgado de lo Social.