«Uno para todos y todos para uno». Como los tres mosqueteros de Alejandro Dumas, la unión puede ser la solución para los momentos de crisis. O eso es lo que piensa Pedro Morales, el recién nombrado presidente de la Asociación de Restaurantes de la Región. La restauración es un sector que se ha debilitado con la situación económica y los locales que se encuentran asociados lo notan. Aunque algunos tienen que cerrar, muchos deciden montar su propio negocio. Por eso, Morales anima a estos profesionales a seguir adelante.

Tras haber sido nombrado presidente de la organización, ¿cuáles son las metas que se marca para estos cuatro años?

Mantener la asociación unida es el primer objetivo que se plantea la junta directiva de esta asociación. Necesitábamos que el barco no se quedara sin timón, por eso, decidí presentarme para ocupar este puesto. Fui uno de los fundadores de esta organización en 1991, que nació para diversificar y especializar Hostemur. Al coincidir con la expo del 92, participamos en el evento y obtuvimos un gran éxito con nuestra gastronomía. En la actualidad, tenemos que consolidar el sector de la restauración en el ámbito regional para que el empresario se sienta en la asociación como en su propia casa.

¿Qué ofrecen a los restaurantes para que se unan a esta asociación regional de restauradores?

Hay inscritos más de doscientos restaurantes en la Región, aunque sólo algunos utilizan nuestros servicios de forma puntual. A los asociados les ponemos al día sobre las cuestiones que más les interesan y establecemos una estrecha relación con ellos. Hacemos todo lo que está en nuestra mano para facilitarles su día a día en cuestiones relacionadas con los ámbitos sanitarios y jurídicos.

Los restaurantes, bares y pubs podrán cerrar una hora más tarde durante las fiestas de primavera de este año, ¿cómo se avecina esta festividad?

La gente sale más a la calle por estas fechas, pero esto no beneficia a los profesionales de la restauración. Los bares de copas son los que resultan más favorecidos con la ampliación del horario de cierre. Los ciudadanos, después de cenar, se van a tomar algo en este tipo de locales, pero no acuden a los restaurantes. Este año, será más duro y difícil para los empresarios de este sector debido a la crisis, ya que muchos no se pueden permitir salir a cenar fuera.

¿No es un sector bueno para encontrar trabajo en estos momentos?

No, al igual que otros muchos, se encuentra amenazado por la crisis económica que estamos pasando. Sin embargo, muchas personas, que acaban hartos de su jefe o de las condiciones laborales, deciden hacerse autónomos y crear su propio restaurante. Una gran mayoría de estos pequeños o medianos locales tienen que cerrar porque no les queda más remedio por las deudas. Ésta es la única forma de salir adelante. Como profesional de la restauración, no dejo de recomendarles que lo intenten, pero tienen que saber que han de realizar un gran esfuerzo. Hay que tener más ilusión que nunca.

En esta situación, ¿la Comunidad apoya a estos profesionales?

Los restauradores nos sentimos, en cierta manera, abandonados por la Comunidad. Con la nueva ley de Turismo se produce una reorganización del tema hotelero, pero no tiene relación directa con los restaurantes. Necesitamos más apoyo por parte de las administraciones.

Ha pasado más de un año de la aprobación de la ley antitabaco en España, ¿cree que ha beneficiado o ha empeorado a los empresarios de la hostelería?

No ha favorecido en absoluto a los hosteleros de la Región. Hemos tenido que invertir una gran cantidad de dinero para adaptar nuestros restaurantes a esta nueva ley. Ha supuesto un gasto innecesario, porque no hemos obtenido ningún beneficio. Lo único bueno es que la sociedad española se ha concienciado con el tema del tabaco. Sin embargo, ha supuesto un perjuicio para nosotros, los profesionales de la restauración. La sobremesa ha desaparecido, porque los clientes comen o cenan y se van.