La cifra de 2,2 millones puede poner fin a la huelga del transporte. El ayuntamiento de Murcia movió ficha ayer para intentar acabar con el paro ilegal (no han comunicado formalmente su intención de realizarlo) que los más de 600 trabajadores de Latbus emprendieron el miércoles y que ayer cumplió su segunda jornada, en la que no se respetaron los servicios mínimos.

De hecho, sólo se subió a un autobús uno de los chóferes para cubrir la línea Murcia-Santomera, que fue increpado por compañeros e integrantes del movimiento 15-M, que están apoyando a los huelguistas. Mientras, decenas de usuarios se quedaron tirados de nuevo en las paradas de autobús, en un paro que afecta cada día a una media de 60.000 viajeros de distintas líneas de 22 municipios de la Región. Al cierre de esta edición estaba reunido el comité de empresa con Latbus y en una asamblea que se iba a celebrar esta madrugada se decidiría si se

ponía o no fin al paro.

La solución que ha aportado el Ayuntamiento con el objetivo de que los ciudadanos vuelvan a tener el servicio público es adelantar hoy mismo 2,2 millones a las entidades bancarias con las que trabaja Latbus y en las que se ha endosado las facturas aprobadas por la Administración local. Con esta operación, la concesionaria volvería a tener capacidad de crédito y así podría pagar las nóminas de mayo y junio a los trabajadores que han iniciado este paro. Los sindicatos que los respaldan afirman que no es una huelga sino un plante.

Esta disposición del Ayuntamiento a inyectar dinero fue comunicada ayer al comité de empresa de Latbus en la reunión que a mediodía mantuvieron representantes de los trabajadores con el concejal de Tráfico, Javier Iniesta. El edil explicó a esta redacción que ese dinero servirá para generar más crédito para Latbus siempre y cuando la compañía negocie con la Tesorería de la Seguridad Social el levantamiento del embargo que pesa sobre la empresa y que asciende a 3.670.000 euros.

Iniesta añadió que la Seguridad Social, con fecha 11 de mayo, comunicó al Ayuntamiento este embargo, que fue levantado parcialmente el 23 de mayo . Sin embargo, como no se ha anulado totalmente «es imposible pagar directamente a Latbus cualquier factura aprobada a partir de abril de 2011, ya que el embargo está aún vigente», resaltó el concejal de Tráfico. La huelga de Latbus generó ayer otras reacciones:

La concesionaria. José Luis Sánchez, gerente de Latbus, indicó que la deuda con la Seguridad Social viene arrastrándose por impagos desde 2008 debido a distintas circunstancias, entre las que citó, los 16 millones que les adeudan las distintas administraciones, la congelación de tarifas en tres años, la subida de salarios y el aumento en los costes. También lamentó que el alcalde, Miguel Ángel Cámara, les llamara mentirosos al reclamarle los débitos que les permitirían pagar sus trabajadores. «Nos ha dejado a la altura del betún», señaló Jiménez, quien especificó que uno de los impagos de la Administración local que asciende a 2,5 millones responde a la puesta en marcha del Unibono, cuyo coste no reconoce el Ayuntamiento por un desacuerdo con la Entidad Pública del Transporte (EPT).

Alcalde y consejero. El alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, y el consejero de Obras Públicas, Antonio Sevilla, se reunieron ayer en La Glorieta y exigieron el cumplimiento de los servicios mínimos. El alcalde dijo que las auditorías de las cuentas de Latbus eran correctas.

FROET propone un recorte de salarios. El secretario general de FROET, Manuel Perezcarro, apuntó ayer que la solución a la crisis de Latbus «pasa por un plan de viabilidad con un recorte de salarios». Mientras, Consumur indicó que proporcionará asesoramiento a los usuarios que estén siendo afectados.. El PSOE pidió que «la Administración local arbitre mecanismos de control sobre las empresas que contrata para gestionar servicios públicos». El portavoz socialista, Pedro López, reclamó también que se acabe con el paro para no perjudicar a los ciudadanos.