La peña El Cañal de Guadalupe se fundó en el año 1998 gracias al empeño de un grupo de amigos interesados por el folclore y por mantener las tradiciones y costumbres de la huerta. Sus inicios fueron en un aula de un colegio abandonado del pueblo, la cual fue cedida por el alcalde pedáneo de entonces, Francisco Hernández, tal y como recuerda su presidenta, Cayetana Martínez Gimeno.

Fue allí donde los miembros de la junta directiva de la peña trabajaron para adecentar el local y lograr convertirlo en una gran sede. Actualmente, El Cañal dispone de un salón para los ensayos del grupo folclórico Santiago Apóstol, un ventorrillo y un aula destinada a exposiciones y a la academia de baile. Asimismo, la peña está orgullosa de un pequeño terreno en el que se construyó un bancal y se instaló una barraca típica.

El Cañal es una peña muy activa y sus socios tiene la oportunidad de participar en numerosas actividades. Taller de panocho, un curso de manualidades, viajes culturales, son algunas de las iniciativas llevadas a cabo por la junta directiva de la peña. Cayetana Martínez también destaca la labor que desempeña el grupo folclórico en cuanto a la difusión de los bailes y cantes de la huerta. Y es que, sus miembros han participado en varios festivales por toda la Región y también son los protagonistas del festival que la peña El Cañal organiza durante su semana cultural, que tiene lugar entre septiembre y octubre.

Es en esta semana cuando la peña también lleva a cabo campeonatos de petanca, bolos, baraja y dominó. Pero, El Cañal no sólo se preocupa del folclore de la tierra, ya que da la oportunidad a las jóvenes de demostrar al público que asiste a su festival «bailes más modernos, esos que les gustan a las chicas de ahora», comenta Cayetana.

Pero, si hubiera que destacar algo de esta peña nacida en Guadalupe sería el teatro. Sus miembros son grandes aficionados, y por ello El Cañal dispone de un grupo de teatro que representa obras escritas en panocho por uno de sus socios, José García Rabadán.

Así, títulos como Mari, prepáranos la mesa o El corral del cura, han llevado a los miembros de este grupo a actuar en el Teatro Romea, el Teatro

Belmar del El Palmar o en centros culturales de diferentes localidades, entre otros lugares. Cayetana Martínez destaca que próximamente la

peña estrenará en el centro cultural de Guadalupe su última obra: No le busque los tres pieses al gato.

Sin duda, se trata de una agrupación huertana preocupada por las costumbres y la cultura popular y muestra de ello son las ganas de trabajar y preparar actividades relacionadas con el mundo de las tradiciones. El Cañal también se preocupa por los más desfavorecidos y por ello suele organizar cada año una gala en beneficio de Jesús Abandonado. El próximo 26 de marzo tendrá lugar la gala de este año, que se celebrará en el salón de actos del centro cultural del pueblo y el público podrá disfrutar de un agradable espectáculo en el que no faltará el humor, la copla y el baile.

En cuanto a las Fiestas de Primavera, El Cañal participa formando parte del desfile del Bando de la Huerta, ya que no instala barraca en Murcia.

Sin embargo, durante los tres primeros años de vida de la peña, sí que se llegó a montar barraca, pero en las fiestas patronales de Guadalupe.

Hablando de fiestas, El Cañal siempre ha sido una peña muy participativa en ellas. De esta manera, en la víspera de San José, invita a los socios a buñuelos con chocolate, tal y como señala Cayetana Martínez, quien recuerda que con motivo de la festividad de Santiago Apóstol (25 de julio), la peña participa en la romería de su patrón.

«El Cañal encargó la imagen del santo al escultor Antonio Castaño Liza, sobrino del maestro Francisco Liza Alarcón. Esa imagen se encuentra en la iglesia de Guadalupe, en una hornacina hecha también por la peña», afirma la presidenta. Tampoco falta la participación del grupo folclórico en la celebración de Los Mayos o en el canto de aguilandos en las fiestas de Navidad. De hecho, la peña huertana El Cañal organiza cada año un festival de villancicos en la iglesia Santa María de Guadalupe.