La Universidad de Murcia comunicó ayer que va a limitar el número de Aulas de Libre Acceso (ALAS) que funcionarán durante este verano, en el marco del plan de austeridad aprobado por el equipo de gobierno de esta institución docente para intentar paliar los efectos de la crisis económica que afecta también a la enseñanza pública. Es la primera vez que los estudiantes no contarán con la totalidad de Aulas de Libre Acceso para preparar los exámenes de septiembre.

Hasta el 31 de agosto, según indicaron ayer fuentes universitarias, sólo estarán en funcionamiento el Ala Mangel, ubicada en el edificio Atica del campus de Espinardo, que lo hará de nueve de la mañana a dos de la tarde, así como el aula Águila, que permanecerá abierta las veinticuatro horas, y la Neblí, que estará disponible también exclusivamente en horario de mañana, estas dos últimas, en el campus de la Merced. La Universidad de Murcia ha desarrollado un sistema de ahorro energético que permite que estas ALAS consuman exclusivamente la energía de los equipos que se estén usando, quedando apagados automáticamente el resto.