La avenida de la Libertad de Murcia quedó ayer totalmente diáfana a excepción de las entradas al aparcamiento en rampas y escaleras, que siguen valladas por razones de seguridad. Hasta la semana del 15 al 20 de enero, según informaron fuentes del Consistorio en una nota, las obras en la superficie estarán paradas. Las aceras, que estarán rodeadas por unas vallas de un metro de altura, también quedarán libres.