Ocho años ha durado el plazo que el Ayuntamiento ha ofrecido a los propietarios de viviendas ilegales en la huerta de Murcia construidas antes de la entrada en vigor en 2001 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y el último día para legalizar las últimas casas se aproxima ya que este 'tiempo de cortesía' concluirá el próximo 31 de enero. Después de esa fecha será imposible, según la Gerencia de Urbanismo, regularizar aquellas viviendas ilegales que se obraron sin licencia municipal. A partir de esa fecha, el concejal de Urbanismo, Fernando Berberena, ya aseguró el pasado mes de abril que el expediente sancionador podría acabar incluso con la demolición de la vivienda y nave en cuestión.

El Ayuntamiento lanzó ayer el penúltimo aviso a los propietarios de viviendas clandestinas, tal y como ha venido realizando en los últimos años. Con la aprobación del PGOU se dio un plazo de cinco años para legalizar las casi 7.000 viviendas y naves industriales que había en el municipio hasta 2001. Una vez terminado dicho plazo y ante la escasa respuesta por parte de los propietarios el Ayuntamiento anunció otra moratoria para legalizar las casas clandestinas que concluye dentro de ocho días. Hasta agosto de 2008 se habían legalizado en Murcia unas 3.000 viviendas, según fuentes de Urbanismo, que calcula que con la nueva moratoria se podría haber dado licencia a otras 2.500 casas. Aunque el concejal Berberena siempre ha mantenido que no hay un censo fiable con el número exacto de viviendas ilegales, en más de una ocasión ha afirmado que podrían rondar las 7.000. En los cinco años de moratoria que se establecieron tras la entrada en vigor del Plan General sólo se legalizó un millar.

Sin embargo, según indicaron ayer fuentes del Consistorio, en estos últimos meses "han sido ya muchos los ciudadanos que han legalizado su vivienda y desde la Gerencia de Urbanismo se considera un éxito esta campaña ya que prácticamente no quedan inmuebles situados en suelo no urbanizable en el anterior PGOU".