La puesta en funcionamiento de un radar por parte de la Concejalía de Seguridad Ciudadana ha puesto en pie de guerra a muchos vecinos, según han denunciado representantes políticos del PSOE e Izquierda Unida-Verdes. El portavoz de esta última formación, Pedro Sosa, afirma que «las sanciones son incluso mucho mayores que las impuestas por la Dirección General de Tráfico». Según Sosa, «algunas de las multas que circulan por las redes sociales son desproporcionadas e incumplen el régimen de sanciones de la DGT, como las de 300 euros y dos puntos del carné a un vehículo que circulaba a 37 kilómetros a la hora por un tramo de 20, cuando según el baremo establecido por la DGT, debería haber sido de 100 euros y sin coste de puntos».

Sosa afirma que «la idea de dotar a la Policía Local de un juguete para dar sablazos a los curritos es otra más de las disparatadas ocurrencias del equipo de Gobierno».

Por su parte, el portavoz del PSOE, Diego José Mateos, ha pedido la convocatoria de un Pleno monográfico sobre seguridad y para solicitar la suspensión del radar hasta que se realice un estudio pormenorizado sobre seguridad vial en el municipio. Mateos entiende que «hay muchas otras alternativas para combatir el exceso de velocidad antes que la colocación de un radar con el que se multa de manera desproporcionada».

Por su parte, la concejala de Seguridad Ciudadana, Mª Belén Pérez, asegura que tras la indicación expresa efectuada por parte del alcalde, Fulgencio Gil, «se ha procedido a la ponderación de la utilización del radar por parte del servicio de Policía Local para que siga controlando el exceso de velocidad y las conductas temerarias al volante en las vías del casco urbano en las que resulta más necesario».