Las fuertes lluvias que el pasado viernes se produjeron en varias zonas de la Región han dejado daños considerables en algunos puntos, como la Vega Media y el Valle de Ricote.

Las tormentas, que incluso vinieron acompañadas de granizo, se sucedieron durante toda la tarde lo que hizo que las plantaciones de fruta, como los albaricoques, nectarinas, melocotoneros, paraguayos o parrales se vieran afectadas.

El recientemente nombrado consejero de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Ángel del Amor, visitó ayer las zonas más afectadas y señaló que, ''tras una primera evaluación, se calcula que la superficie dañada ocupa unas 2.800 hectáreas''.

El titular de Agua transmitió elapoyo del Gobierno regional a los agricultores afectados, que le trasladaron que el granizo dañó gravemente sus cultivos, sobre todo de melocotón, albaricoque, nectarina, parrales, paraguayos y uva de mesa principalmente en los municipios de Ulea, Fortuna y Molina de Segura, así como en algunas zonas de Jumilla y Santomera.

Del Amor resaltó que los técnicos de la Consejería ''se pusieron de inmediato a trabajar conjuntamente con los afectados para tener cuanto antes una evaluación exacta de los daños producidos''.

''Esa es la primera medida que hay que tomar, evaluar los daños, para que, en cuanto tengamos estos datos, podamos transmitirlos al Ministerio de Agricultura, a fin de que articule medidas con celeridad acordes con los daños registrados''.

La fruta de hueso está durante estos meses en plena campaña y el temporal, dejó también como resultado final ramas partidas, hojas de los árboles agujereadas y gran variedad de este tipo de fruta picada, por lo que el único remedio es que se use para producir zumo.

Según constató ayer, gran parte de la superficie afectada ya sufrió otro episodio de granizo en el mes de marzo, lo cual, según el consejero de Agua, pone de manifiesto ''la vulnerabilidad del sector» por lo que, señaló que «es fundamental la contratación del seguro agrario en aras a estar protegido de todas las inclemencias''.

También en la pedanía jumillana de Román, cerca con el límite de los municipios de Abarán y Cieza, la tormenta causaba importantes daños para las plantaciones de los agricultores de la zona.

En muy pocos minutos se llegaron a recoger dieciocho litros de agua por metro cuadrado, «con la presencia de pedrisco del tamaño de un garbanzo, acompañado de fuertes rachas de aire», según una de las vecinas afectadas.

Asimismo, las fuertes lluvias también afectaron a los parajes de Casablanca y el Aljunzarejo, con importantes daños, ya que en esta zona se dedica a la agricultura con miles de hectáreas de Albaricoque, melocotón y nectarina.

A lo largo del día de ayer se estuvieron realizando visitas a las explotaciones agrarias para hacer una valoración final de los daños en los diferentes cultivos.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha decretado nivel amarillo por fuertes vientos para mañana en el Noroeste de la Región. Según informaron fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias se prolongará hasta las 18 horas de hoy. La previsión es que se produzcan rachas de viento de hasta 70 km/hora.