El convento de los padres carmelitas de Caravaca conservará una reliquia certificada de San Juan de la Cruz. La reliquia ha pertenecido durante varias generaciones a la familia Ruiz de Assín, que ahora ha decidido donarla al convento, que fuera fundación directa de San Juan de la Cruz. La reliquia fue retocada por la Vera Cruz en una ceremonia que estuvo presidida por el general de la Orden del Carmelo Descalzo, Saverio Cannistrà, quien se encuentra realizando una visita pastoral a las comunidades de carmelitas descalzos de Cataluña, Aragón, Valencia, Murcia y Andalucía.

Tras la celebración, en la que estuvo presente el alcalde de Caravaca, José Moreno, Cannistrà firmo en el libro de honor de la Cofradía en la Torre Chacona. Hasta en siete ocasiones visitó San Juan de la Cruz la ciudad de Caravaca. Una de ellas para fundar el convento de padres carmelitas, el 1 de marzo de 1587. El santo estaría presente en el momento de la reserva del Santísimo en la capilla provisional, según narra el padre José León en el libro sobre la historia de este convento. Por este motivo -asegura el prior- es tan importante para los carmelitas que el nuevo relicario esté bendecido por la Vera Cruz, «para que tenga esa relación de San Juan con la Cruz de Caravaca».