El abandono de muchos de los montes privados de la Región pone en peligro al resto de espacios forestales. Una plaga que afecta a varias fincas de la Comarca del Río Mula ha provocado la caída de árboles que se están secando y supone un polvorín de cara a la temporada de calor. Aunque la situación se registra en diversos puntos de la Comunidad Autónoma, afectando tanto a montes públicos como privados, la falta de agua ha generado que una parte importante de la masa forestal se encuentre afectada por la plaga 'tomicus detruens' conocida como barrenillo del pino mediante la que un pequeño escarabajo, que se reproduce en pinos estresados por la sequía, se alimenta de su sabia hasta secarlos por completo.
En la Comarca del Río Mula, en varias zonas localizadas tanto en los municipios de Pliego y Mula los efectos de esta grave situación son claramente visibles. El resultado son pinos secos, con ramas caídas, en algunos casos incluso invadiendo caminos y carreteras de paso, mostrando un panorama desolador y un grave riesgo ante posibles incendios.
La Región cuenta con una superficie forestal de 511.293 hectáreas de las que 362.510 hectáreas pertenecen a propiedad privada o desconocida. Según se desprende de la Ley 21/2015, de 20 de julio, por la que se modifica la Ley 43/2003, de 21 de noviembre, de montes, la gestión de los montes privados corresponde a sus titulares.
Si un particular está interesado en la prevención selvícola de sus montes, puede actuar particularmente en ellos, previa autorización de la Dirección General de Medio Natural, al tiempo que tiene la obligación de comunicar la aparición atípica de agentes nocivos a los órganos competentes de las comunidades autónomas.
La actuación para mantener estos espacios en correctas condiciones, tanto externamente como en lo relativo a la enfermedad de los árboles deberían disponerse de parte de los propietarios resultando incluso la posibilidad de acogerse a diversas ayudas que anualmente lanza la Comunidad. Actualmente la Consejería está trabajando para la publicación de la convocatoria de ayudas correspondiente al año 2018 por lo que los propietarios de estos montes privados estaría dentro de posibilidades de optar a dicha convocatoria. Otra de las opciones es que los propietarios contraten los trabajos de acondicionamiento y mantenimiento de dichos montes con sus propios medios para lo que deberá comunicarlo a la administración.
