El presidente de la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Lorca, Juan Francisco Gómez, se muestra «prudente» a la hora de determinar la longitud que se debería soterrar para la integración de la ciudad con motivo de la llegada de la Alta Velocidad. El presidente del ente cameral lorquino es partidario de ejecutar el proyecto por fases para evitar molestias a los ciudadanos.

A pesar de ello, Gómez valora de forma muy positiva los avances que se han dado con la licitación de los tramos entre Lorca-Pulpí y Santomera-Lorca, respectivamente. Gómez considera que «la llegada de la Alta Velocidad es fundamental para el futuro desarrollo social y económico de esta comarca».

Señala asimismo que «la posición de la Cámara de Comercio es que tiene que ir soterrado», pero añade que «hay que hacer las cosas con raciocinio y no se puede desde un primer momento disponer de 10 kilómetros de soterramiento». En este sentido señala que «lo mismo que se hace en las empresas, las inversiones hay que hacerlas de forma paulatina, en base a unos ingresos» y señala que «quererlo todo desde el principio resulta muy complicado», aunque insiste, en que debe llegar a Lorca soterrado.

Es partidario, incluso de hacerlo por fases. En este sentido ha dicho que «hay que procurar que las obras que conlleva el proyecto molesten lo menos posible a la ciudadanía» y justifica el soterramiento porque «el problema es el estrangulamiento que puede sufrir la ciudad, algo que hay que evitar a toda costa». Ha señalado también que «deben ser los técnicos los que decidan la longitud del soterramiento», aunque reconoce que «cuanto más, mejor».

Gómez también reconoce que «no es factible afrontar un proyecto de esa magnitud, de hoy para mañana», añadiendo que «hay que pensar en el futuro y luchar porque sea lo máximo posible dentro de los requerimientos técnicos que haya, pensando en la población y en los ciudadanos del futuro».

Gómez afirma asimismo que cuando ya esté definido el proyecto, la Cámara de Comercio, realizará un informe sobre el impacto económico que la llegada de la Alta Velocidad puede suponer para la comarca.

El presidente de la Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales (CECLOR), Antonio García, es partidario de que el soterramiento sea, como mínimo de 3,5 kilómetros de longitud, mientras que el PSOE eleva la cifra hasta los 4,3 kilómetros para evitar apantallamientos.