La Benemérita investiga las circunstancias que rodean a la muerte de un menor de edad que fue encontrado por su familia ahorcado en su casa de La Unión.

Fue hallado sobre las diez menos veinte de la noche del martes, en una vivienda de la barriada de Santa Bárbara, cercana al centro de salud de la localidad. Según explicaron fuentes cercanas al caso, el niño estaba jugando en la calle y uno de sus hermanos le llamó para que entrase en el domicilio a que hiciese los deberes. El pequeño así lo hizo y se metió en su cuarto. Pasado un tiempo, como no sabían de él, sus parientes entraron en la habitación y allí lo encontraron, aún con vida.

Los familiares del menor llamaron al Centro de Coordinación de Emergencias para solicitar ayuda. Al lugar se desplazaban sanitarios, que consiguieron, en principio, reanimar al pequeño «hasta tres veces», informó ayer el delegado del Gobierno en Murcia, Francisco Bernabé.

Tras revivirlo, el pequeño fue llevado en ambulancia al Santa Lucía de Cartagena, donde quedó ingresado. Sin embargo, no logró reponerse y finalmente falleció allí ayer por la mañana.

El cuerpo fue llevado al Instituto de Medicina Legal, para practicarle la autopsia. Cuando se realice y los restos sean devueltos a la familia, la idea es «llevarle a Marruecos», aunque primero se haría un velatorio en El Algar.

«He estado con la familia y esto es inexplicable», subrayaba ayer el alcalde de La Unión, Pedro López. «Son vecinos de la barriada donde me crié, donde aún vive mi madre», apuntaba el regidor. También habló del shock y la «sorpresa» que ha causado en el pueblo lo sucedido, dada la corta edad del fallecido.

Escenas de dolor se vivían ayer por la mañana en la barriada. La madre y una de las hermanas del niño (el matrimonio tenía cinco hijos) eran atendidas en el centro médico. El Ayuntamiento puso a disposición de la familia a psicólogos, destacó el alcalde.

La familia del menor trabaja «en labores agrícolas» y es de origen magrebí, aunque lleva «más de veinte años en España», dijo López, que calificó al menor de «simpático y extrovertido». «Esto es tristísimo», sentenció.

«No había antecedentes de problemas ni ninguna incidencia de convivencia escolar ni acoso en el centro educativo. Por respeto a la familia y al tratarse de un menor, desde la Consejeria de Educacion no podemos dar más información».

Así se expresaban desde la Consejería de Educación acerca del menor encontrado muerto en su casa de La Unión. El mismo departamento apuntaba que «el equipo específico de convivencia, así como el observatorio de la convivencia, se han puesto a disposición del centro para poner en marcha el protocolo de duelo con los compañeros».

La última vez que se hizo público el caso del suicidio de un menor en la Región, y causó un gran impacto en la opinión pública, fue con el caso de Lucía, la adolescente de Aljucer que se quitaba la vida en su casa. Lucía llevaba meses relatando que sufría acoso en su instituto. El caso acabó archivándose.