El delegado del Gobierno, Francisco Bernabé, ha anunciado este miércoles la puesta en marcha de medidas destinadas a reforzar la seguridad en Molina de Segura y urbanizaciones del entorno ante los últimos robos con violencia registrados estos días pasados en Altorreal y Monte Príncipe.

"Tenemos montado un operativo especial para evitar que estos hechos se vuelvan a producir en el futuro", ha destacado Bernabé, quien ha mandado un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía.

Por otro lado, ha dejado claro que las hipótesis con las que está trabajando la Guardia Civil, en el caso del robo en una vivienda de Las Torres a plena luz del día este martes, y la Policía Nacional en el caso de los tres robos con violencia en urbanizaciones de Molina de Segura, en uno de los casos se llegó a agredir sexualmente a su moradora, es que se trata de dos grupos distintos. Tampoco está relacionado con el robo en vivienda cometido esta pasada madrugada en una vivienda de la pedanía murciana del Esparragal.

Según Bernabé, son dos organizaciones distintas, aunque ha declinado dar más detalles al respecto, dado que las investigaciones se encuentran bajo secreto de sumario. "Se están empleando todos los medios disponibles para localizar a estos delincuentes y detenerlos", ha dicho.

Por ello, considera que "es momento de dejar trabajar a las FCSE en lugar de lanzar mensajes alarmistas que lo único que generan es inquietud en la población".

Refuerzo policial

Sobre el refuerzo policial en Molina de Segura, Bernabé ha explicado que la Policía Nacional está en "perfecta" coordinación con la Policía Local de dicha localidad y se ha llegado a un acuerdo para sectorizar la zona, de manera que cada uno de los Cuerpos se dedique a patrullar unas barriadas concretas.

"Cada uno de los dos cuerpos tiene unas zonas concretas en las que patrullar", ha indicado Bernabé, quien también ha anunciado un dispositivo especial de controles y filtros, en los que se parará a todo aquel que se considere oportuno o sospechoso "para llevar a cabo un mayor control en los accesos a las zonas".

Además, ha comentado que la Comisaría de Molina "tiene de forma activa un total de 50 miembros de la Policía Nacional para garantizar y vigilar, de forma permanente, durante las 24 horas al día, las zonas asignadas y, por parte de la Jefatura Superior de Policía, se ha acordado enviar un refuerzo de diez agentes más", con lo que el total de efectivos asciende a 60.

A ello se suma un operativo en el que participarán, de forma continuada, tres o cuatro vehículos de la Policía Nacional con rótulos y camuflados.

El objetivo, con todos estos medios, es "llevar a cabo mecanismos de refuerzo, estamos poniendo lo mejor de nosotros mismos en estas cuestiones".

"Estamos en contacto permanente con las comunidades de propietarios para ver las actuaciones que se pueden acometer y que todo se desarrolle de la mejor forma posible", ha subrayado Bernabé, quien ha explicado que "por la propia tipología de lo que son estas zonas, la gran mayoría de las viviendas son chalets con sus propias parcelas, las distancias entre propiedades son importantes y una vez en el interior se hace complicado que pueda haber ruidos en el exterior".

Entonces, ha señalado, "la vía pública se reforzará para mejorar la seguridad ciudadana, pero también los propietarios de las viviendas deben de extremar las medidas de precaución ante las circunstancias físicas concretas de lo que son sus inmuebles".