El juez de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Caravaca de la Cruz ha declarado el sobreseimiento de una denuncia anónima contra el alcalde de Caravaca, José Moreno, por una factura que se emitió de unos 43.000 euros por unos servicios de vigilancia en un polígono industrial de la localidad.

La fiscal aprecia en su informe «que el abono de los referidos servicios no es constitutivo de ninguna de las infracciones penales que se imputaban en la citada denuncia anónima. A la vista de las pruebas practicadas se considera acreditado que los trabajos abonados fueron realizados».

Los hechos se remontan al año 2012, durante la legislatura de gobierno del PP, cuando un empresario presentó una factura en el consistorio caravaqueño reclamando 42.338 euros, que se le adeudaban, por unos servicios de vigilancia prestados en el polígono industrial de Cavila. En 2015 el citado empresario, acompañado por su abogada, volvió a reclamar en el Ayuntamiento el pago de los mismos, siendo éstos abonados con los respectivos informes favorables del interventor y del tesorero municipal.

Tras el estudio realizado por el juez instructor, éste entendió que no había relevancia penal en los hechos de la denuncia. En concreto, que no se apreciaban indicios de ninguno de los delitos denunciados, motivo por el que el pasado 28 de diciembre de 2016 el citado juez acordó, mediante auto motivado, el sobreseimiento y archivo de la causa. A raíz de la nueva denuncia anónima presentada, el año pasado en la Comisaría de la Policía Nacional de Lorca, y a requerimiento del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº 2 de Caravaca de la Cruz, el Ayuntamiento remitió toda la documentación solicitada por el Ministerio Fiscal.

En relación a este asunto, el alcalde de Caravaca, José Moreno, comparecía acompañado de varios ediles del equipo de gobierno. Moreno explicó que «en ningún momento he estado investigado en la causa, ni he sido reclamado para testificar», recordando que «esta denuncia ya fue archivada en el año 2016, porque no se apreciaba delito alguno ni arbitrariedad en la actuación del consistorio».

Moreno lamentó que su nombre se pusiera en entredicho durante una sesión de control en la Asamblea Regional, «todo ello sin que hubiera ninguna base documental que lo fundamentara», explicando que «no había llegado ningún auto implicando al alcalde en este proceso, si a fecha de hoy ha llegado». Para el alcalde ha prevalecido el «difame que algo queda». Moreno puso de manifiesto que, según el escrito del juzgado, «no somos culpables por pagar las deudas que ha dejado la anterior corporación municipal del Partido Popular, arreglamos lo que otros dejaron mal y encima nos quieren difamar por ello». Por último declaró que «esto no acaba aquí. Habrá más intentos para desacreditarme, porque es más fácil difamar que conseguir las cosas por méritos propios».