Agentes de la Policía Nacional detuvieron a cinco personas como presuntos autores de un delito relativo a la prostitución, contra los derechos de los trabajadores, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. A finales del pasado mes de octubre, la Policía Nacional tuvo conocimiento de la denuncia presentada por una mujer a través del Teléfono gratuito de Atención a las Víctimas de Trata de Seres Humanos, el número 900.105.090, dependiente de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.

La denunciante manifestaba que se encontraba retenida desde hacía una semana en un club de alterne de Blanca donde se encontraba ejerciendo la prostitución. Además indicaba que recientemente había sido agredida por los dueños y personal de este club como consecuencia de una presunta deuda de mil euros que tenía con los mismos.

Dada la gravedad de los hechos, la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia articuló un dispositivo de inspección policial en ese establecimiento con el principal objetivo de auxiliar a la denunciante.Durante la intervención, la víctima objeto de este dispositivo, fue trasladada al objeto de que recibiese atención sanitaria y psicosocial con la ayuda de la ONG Apramp (Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida) de Murcia. La denunciante presentaba graves lesiones por la agresión sufrida requiriendo de intervención quirúrgica para su curación.

De las distintas declaraciones aportadas por las mujeres halladas en este establecimiento donde las mismas desarrollaban actividades de alterne y prostitución, se pudo constatar que ninguna poseía contrato laboral y eran controladas por los dos propietarios, un portero y dos camareras que llevaban la contabilidad de los servicios sexuales. Todas las chicas debían pagar por alojarse en este local donde se encontraban sujetas a un sistema de normas; su incumplimiento daba lugar a la imposición de sanciones económicas que a su vez generaban deudas con intereses por lo que eran complejas de saldar.

Los responsables del club se lucraban directamente del ejercicio de la prostitución de estas mujeres al quedarse con un porcentaje de los beneficios económicos derivados de estas actividades. Además los trabajadores de esta establecimiento complementaban la principal actividad de prostitución con el suministro de sustancia estupefaciente a los clientes, concretamente cocaína. Los agentes policiales procedieron al arresto escalonado de las cinco personas implicadas: tres hombres de nacionalidad española de edades comprendidas entre los 27 y los 32 años, y dos mujeres de nacionalidad colombiana y dominicana, de 26 y 52 años respectivamente.