Las dos niñas cuyos padres agredieron presuntamente a una monitora del comedor del colegio La Asunción de Alcantarilla y fueron trasladadas al centro escolar Nuestra Señora de la Salud de la localidad dejarán el nuevo colegio tras una petición de sus progenitores «por la gran presión social que sufren». La consejería de Educación ha aceptado esta propuesta, porque «lo que prima es el bienestar de las menores».

Y es que la situación se había hecho insostenible tras el traslado, hasta el punto de que casi 200 padres de los alumnos habían pedido formalmente que cambiaran a sus hijos de colegio y apenas entraban a La Salud medio centenar de escolares. Aunque fuentes de Educación comentaron a esta Redacción que no iban a rebelar la escuela a la que las mandará, «porque son menores», recuerdan que «el equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica Específico de Convivencia Escolar trabajará a diario con ellas».