El Consejo Jurídico de la Región (CJRM) ha declarado la responsabilidad patrimonial de la Consejería de Educación por el accidente sufrido por una alumna de un colegio de San Javier que se fracturó tres dientes en clase de Educación Física porque no recibió la atención que precisaba debido a la pluridiscapacidad que sufre. El dictamen coincide con el instructor del expediente abierto en la Consejería en que existe una relación de causalidad entre el daño sufrido por la alumna y el funcionamiento del servicio público educativo.

El padre de la accidentada reclamó una indemnización de 756 euros por las lesiones sufridas por aquella, que sufrió también la rotura de sus gafas al tropezar con el andador que utilizaba debido a su situación física. Comenta el CJRM que «la forma en que la menor cayó al suelo, sin que pudiera extender los brazos para defenderse de la caída, denota que el profesor de Educación Física no se encontraba cerca de ella en ese momento para tratar de sujetarla en caso de que sufriera un accidente».