Ocurría sobre las cuatro y veinte de la madrugada del lunes, en la Caja Rural Central de Bullas. Cuatro hombres, según relataron testigos al Centro de Coordinación de Emergencias, destrozaron un cajero automático con el fin de llevarse el dinero que hubiese dentro. Sin embargo, los sospechosos no pudieron llegar a los cajetines en los que se guarda el efectivo. Saltó la alarma del banco. Los atracadores escaparon del lugar en un vehículo. Los testigos no se ponen de acuerdo en color ni modelo. Se alertó a la Benemérita, indicaron fuentes cercanas.

Apenas veinte minutos después, los mismos sospechosos perpetraban otro golpe. En esta ocasión, en la sucursal del Sabadell que hay en Campos del Río. Los cuatro atracadores forzaron la puerta del banco. Una vez allí, se valieron de una sierra radial para reventar el cajero automático. Se llevaron varios fajos de billetes, aunque no ha trascendido a cuánto asciende la cantidad robada.

Del caso se ocupa la Policía Judicial del Instituto Armado. Fuentes cercanas apuntaron que se trata de una banda itinerante que no es la primera vez que actúa en la zona. La investigación se encuentra abierta y se espera que en breve se produzcan arrestos relacionados con ella.

Atraco en Librilla en verano

Todo ocurrió sobre las cuatro de la madrugada, en el Caixabank ubicado en la calle Maestro Espada de la localidad de Librilla.

Fueron los responsables del banco los que se pusieron en contacto con la Benemérita a la mañana siguiente, al detectar que habían forzado su propiedad.

Las cámaras de seguridad captaron a uno de los asaltantes, lo cual puede facilitar su identificación. En concreto, se le ve manipulando el cajero. Aunque en el vídeo sólo aparezca una personas, desde el Instituto Armado no descartan que hubiese más implicadas en el asalto: por ejemplo, otra que estuviese aguardando en coche para escapar.

Al producirse el asalto de madrugada, no había nadie en las dependencias de la entidad, por lo que no se registraron daños personales: sólo materiales.

Buscado desde 2013

En mayo de este año, la Guardia Civil de Alicante arrestaba a un hombre de 58 años como el presunto atracador a siete sucursales bancarias en Alicante y Murcia, en los que se llevó 350.000 euros, que estaba en búsqueda y captura desde 2013. Asimismo, se ha detenido a su compañera sentimental, de 48, por su presunta implicación, según ha informado el Instituto Armado en un comunicado.

En el momento de la detención, en la localidad alicantina de Hondón de los Frailes (Alicante), se les intervino dos revólveres, tres cajas de munición compatible con los mismos, unos 50.000 euros en efectivo, y capuchas y efectos que utilizaban durante los hechos delictivos.