El Ayuntamiento de Torre Pacheco da por pagadas todas las facturas acumuladas en los cajones del Consistorio durante años, pasando de 32 millones de euros de deuda municipal a finales de 2015, cuando tomó posesión del Gobierno local el Partido Independientes de Torre Pacheco, a 17, 5 millones actuales, 14,5 millones menos en dos años. Según explica el Consistorio a través de un comunicado, tras la finalización de la primera fase del Plan de Regularización y Reducción del periodo medio de pago que se inició el pasado mes de mayo, en este periodo se han hecho frente a cuatro reconocimientos extrajudiciales de crédito por un importe de más de dos millones de euros, la normalización de pagos sin efectuar todavía y la devolución de 328.000 euros que «lastraban la contabilidad municipal desde hace años».

En la mayoría de estas facturas pendientes, el equipo de Gobierno local señala a los antiguos gestores municipales, del Partido Popular, como causantes del impago y su acumulación desde hace años. En concreto, los reconocimientos extrajudiciales, según el Ayuntamiento, corresponden a gastos acometidos durante ejercicios anteriores que no habían quedado reflejados en la contabilidad municipal: Gastos en festejos y eventos de 2012 a 2015 por más de 250.000 euros, facturas de limpieza viaria o recogida de residuos por más de 350.000 euros.

El retraso en el pago de facturas viene dado, según indica el Consistorio, por varios factores, entre los que señala «la falta de diligencia en los procedimientos de contratación -o su inexistencia-», de los que la actual corporación municipal se percató después de su llegada a la alcaldía tras la moción de censura aprobada contra Fina Marín, anterior regidora, desimputada por un presunto delito de prevaricación en julio de este año tras el archivo de la causa.

Otros recibos pendientes

Del mismo modo, se ha procedido a la devolución de más de 328.000 euros y 87 facturas, de los cuales 45.000 euros corresponden a facturas de la concesionaria del parking municipal, cuyo contrato fue resuelto en febrero de este año 2017, y que ahora gestiona directamente el Consistorio. «También se han devuelto más de 600 euros de facturas en comidas realizadas por la anterior corporación», mientras añaden que tras pedir explicaciones al PP, «los concejales populares no han podido determinar quién encargó o quién participó» en dichas comidas.

Esta regularización acometida por la Concejalía de Hacienda «devolverá al Ayuntamiento a la normalidad contable, iniciando una nueva época de gestión ordenada y transparente de pagos». La misma área municipal avanza ya que prepara una nueva reducción de deuda «de más de cuatro millones de euros antes de final de año».

Todos estos pagos de facturas pendientes y la amortización anticipada ha podido llevarse a cabo «a cuenta del superávit presupuestario del ejercicio de 2016, que ascendió a más de 6 millones de euros».