Alrededor de 2.000 alumnos de los institutos Ros Giner e Ibáñez Martín de Lorca tendrán que convivir la mayor parte del curso escolar 2017-2018 con las obras de los pabellones deportivos que se están llevando a cabo y de las que se beneficiarán de forma conjunta ambos centros. La consejera de Educación, Adela Martínez-Cachá, junto al alcalde, Fulgencio Gil, visitaron ayer los trabajos que ya se encuentran ejecutados en un 25%. Cachá pidió a profesores, padres y alumnos «que tengan paciencia por las molestias que pueden causar las obras» y agradeció a toda la comunidad educativa «su buena disposición».