Los vecinos de Caravaca de la Cruz están de enhorabuena. Y es que la iglesia de San José, integrada en el conjunto monumental del antiguo convento de las Madres Carmelitas Descalzas, ha reabierto sus puertas al público. La reapertura de este espacio, situado en la calle Mayor, ha sido posible gracias al convenio de cesión suscrito recientemente entre el Ayuntamiento de Caravaca de la Cruz y la entidad financiera Bankia, propietaria del inmueble desde el pasado 12 de mayo.

En virtud del citado acuerdo, la mercantil Bankia, S.A. cede gratuitamente el uso a los exclusivos fines públicos consistentes en la organización de diferentes exposiciones en la zona del claustro, así como de conciertos y otro tipo de eventos culturales en la antigua iglesia. El templo se abre todos los días, de 10 a 13 horas.

Desde la Concejalía de Turismo del Consistorio caravaqueño informan que la iglesia se encuentra abierta al público desde el pasado martes, y que actualmente se están llevando a cabo labores de limpieza y acondicionamiento en el claustro del convento para la realización de exposiciones artísticas de diversa índole durante los próximos meses.

De estilo rococó

El Monasterio de San José de Madres Carmelitas Descalzas fue fundado por Santa Teresa de Jesús, en 1576. El edificio tiene dos partes diferenciadas: la iglesia y el monasterio. La iglesia, de una sola nave, se reformó en el siglo XVIII y su decoración interior pertenece al estilo rococó.

Sillería del siglo XVIII

La fábrica del templo religioso de San José es de mampostería y ladrillo, así mismo cuenta con una portada de sillería del siglo XVIII. Su estructura interna es de una sola nave de 28,5 metros de longitud por 14 metros de ancho, está cubierta por una bóveda vaída, con capillas laterales cubiertas por bóvedas de medio cañón con lunetos. El coro se sitúa a los pies, en dos cuerpos: alto y bajo y todos supone una joya religiosa.

Emotiva procesión bajo palio de la Vera Cruz

La Santa Cruz de Caravaca volvió a cumplir ayer con la tradición y procesionó bajo palio por los extramuros de la Basílica-Santuario, acompañada por el cuerpo de 'armaos' y por miles de fieles. Después se realizó la bendición de la ciudad, su huerta y sus campos desde los cuatro puntos cardinales para prevenirlos de catástrofes naturales. Antes el Obispo de la Diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca, presidió la eucaristía que ponía punto final al Quinario que organiza la Real e Ilustre Cofradía de la Vera Cruz, donde este año han ocupado la Sagrada Cátedra el Custodio de Tierra Santa, el Arzobispo de Santiago de Compostela y el vicario de zona.