El último encierro de las Fiestas de Calasparra se saldó con un herido por asta de toro. El hombre, natural de Calasparra, que se encontraba viendo el encierro en la parte exterior del vallado con la rodilla apoyada entre dos tablas, fue sorprendido por una res brava que le corneó en la rodilla izquierda.
Una vez trasladado hasta la enfermería de la plaza de Toros, ha sido atendido por el doctor Robles, quien explicó que sufrió «una puntada en la rodilla izquierda, en el cuádriceps». Tras ser anestesiado, se ha comprobado que la cornada es de unos diez centímetros y que llegaba a romper el cuádriceps, siendo operado en la enfermería y trasladado posteriormente al Hospital Comarcal del Noroeste.
Era la primera vez que se realizaba un encierro por vereda con reses bravas en Calasparra. Desde primera hora de la mañana cientos de personas se congregaban en las inmediaciones de la población para ver entrar al ganado bravo por la vereda de San Miguel, hasta la zona de corrales. Posteriormente se realizó un encierro por el recorrido tradicional y una suelta de vaquillas.
La población del Noroeste murciano bajaba el telón de esta forma novedosa a sus populares Encierros de la Feria del Arroz, que en esta edición 2017 se saldan con un total de cuatro heridos por asta de Toro.
