Calcinado. Así quedó anoche un autobús que estaba estacionado en el aparcamiento frente a la discoteca Maná San Javier.

Más de medio centenar de llamadas en torno a las 1.15 horas de la madrugada alertaron al Centro de Coordinación de Emergencia. Los jóvenes que avisaron al 112 informaron de que había un fuerte olor a neumático quemado y de que había varios coches estacionados muy cerca del autobús. De este modo, Emergencias movilizó de inmediato a los bomberos, así como a agentes de la Policía Local.

Hasta el lugar se desplazaron cinco efectivos y dos vehículos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de la Región y policías locales del municipio costero.

Los bomberos apagaron el fuego, que para su llegada ya había devorado prácticamente todo el vehículo.

Afortunadamente, no hubo que lamentar más daños en los coches aparcados cerca y no se registró ningún herido.