Ante la denuncia presentada por la Fiscalía contra el alcalde de Abarán, Jesús Molina Izquierdo, por presunta prevaricación, uso de información privilegiada y fraude a la administración tras la permuta de una finca agrícola por otra forestal, el regidor de la localidad aseguró ayer a esta Redacción que todavía no ha recibido la notificación, pero que tanto las subastas como las permutas ejecutadas bajo su mandato, «siempre se han realizado de acuerdo a la legalidad y con un control de los técnicos municipales de todo el proceso».

Molina se mostró sorprendido por la denuncia y asegura que cuando tenga la notificación estudiará a fondo el expediente, aunque destaca que está «tranquilo», ya que «en el Ayuntamiento siempre hacemos todo de manera legal y no perjudicamos a nadie».

Sobre las permutas realizadas en su primer mandato, explica que recuerda que se hicieron varias de terrenos descatalogados y que varios vecinos estuvieron interesados. Pero remarca que «todo se hizo con los informes técnicos actualizados y con los pasos necesarios por ley».

Molina asevera que las subastas de terrenos fueron muy habituales a mediados de los 90 y que es un procedimiento que es normal dentro de las administraciones locales. Sobre el caso concreto del terreno del Cabezo Negro, dice no recordar los pormenores de todas las actuaciones y que cuando estudie la denuncia podrá defenderse y explicar qué pasó. La denuncia está en el juzgado de Cieza y ahora será el juez el que decida si lo llama a declarar.