El entierro de Catalina M. G., la vecina de Cazalla que fue asesinada por su expareja junto al polígono industrial de Totana se celebrará esta mañana a las once. El cadáver llegó ayer tarde hasta el tanatorio Blaymar de Lorca, donde se instaló la capilla ardiente. Durante la tarde y noche de ayer fueron varios centenares de personas las que pasaron por el tanatorio para dar el pésame a la familia, entre quienes se encontraban sus tres hijos.

Las reacciones ante el asesinato no se hicieron esperar. La presidenta de la Federación de Organizaciones de Mujeres de Lorca, Pilar Fernández, dio lectura a un manifiesto elaborado conjuntamente con el Fórum de Política Feminista de Murcia y apoyado por la plataforma 7N de la Región de Murcia. En dicho manifiesto se pidió una mayor implicación de las administraciones públicas para acabar con la lacra de la violencia machista.

Según Fernández, «no hay que recortar en partidas de igualdad, sino ampliarlas, porque con ello se llega hasta las políticas de prevención». Fernández destaca que «la prevención, formación y educación son fundamentales para solucionar el problema».

Por su parte, la presidenta del Fórum, Gloria Alarcón, señaló que «son las administraciones públicas las que tienen la llave» y añadió que «hay que ser contundentes».

El alcalde, Fulgencio Gil, mostró su más absoluto rechazo ante esta brutal agresión, añadiendo que «la lacra de la violencia de género exige la implicación directa de los agentes sociales y de la ciudadanía en general».

El partido Podemos Lorca también se suma al rechazo a la violencia de género y solicita más medios para combatir la lacra y prevenir actitudes machistas o que supongan un daño a la mujer.