¿Cómo son las fiestas de Fuente Álamo?

Son unas fiestas tradicionales y patronales, que duran más de diez días y que son muy variadas. Se programan festejos de todo tipo para jóvenes, para niños, para mayores. Son muy participativas. Desde el Ayuntamiento hemos hecho un esfuerzo presupuestario para que sean unas buenas fiestas, pero con la ayuda de todos los vecinos hemos conseguido un programa muy atractivo.

¿Qué novedades hay previstas para este año?

Este año hay espacio para dos géneros musicales como el rap y la rumba, que no estaban muy presentes en otras ediciones.Además, hay actividades para los niños todos los días, ya se ha superado el planteamiento de un único día del niño, para que los pequeños se diviertan todos los días de las fiestas y no solo uno. Por eso hemos creado este año el chupinazo infantil que será hoy, antes del chupinazo tradicional.Asimismo, se va avanzando en la participación de la gente que se encarga de la elaboración de carrozas artesanales, que se había perdido en los últimos años.

¿Qué es lo más destacado del programa?

Tradicionalmente, en los últimos 20 o 30 años, lo más popular ha sido la Noche de los Disfraces, en la que se hace un concurso y todas la peñas participan. Eso será el miércoles. Además, este año tenemos la actuación de la conocida banda de pop Dvicio. También pinchará el dj Tao Kross, que es muy conocido en la música electrónica. A todo esto hay que sumarle el Festival de Folclore Villa de Fuente Álamo, que es un referente en el Sureste por la calidad que reúne cada año su cartel.

Las fiestas son por San Agustín, el patrón de la villa. ¿Cómo se vive esta devoción?

San Agustín es el día 28 de agosto, jornada en la que concluyen las fiestas. Hay una devoción muy arraigada en el pueblo por él. El día del patrón se hace la tradicional procesión por las calles del pueblo, que tiene muchísima participación y devoción popular.

¿Las peñas son el motor de estos días de fiesta?

Sin duda. Hace 30 años que surgieron las primeras peñas y que se produjo un cambio radical en las fiestas, porque gracias a ellas los festejos salieron a la calle. Fue el gran cambio de unas fiestas que siguen evolucionando combinando tradición e innovación. Hay más de 40 peñas en el recinto de fiestas, aunque, en total, habrá más de medio centenar de peñas y seguro que alcanzamos el millar de peñistas.

¿Cómo vive usted las fiestas siendo alcalde?

Yo las vivo desde una doble vertiente, soy peñista desde hace 30 años, de la peña Rockers, una de las más veteranas del pueblo. Las vivo con mis amigos y con mi familia, y eso lo combino con mi participación institucional que debo cumplir como alcalde. Lo llevo muy bien porque hay tiempo para todo. Este año las fiestas duran más. Son diez días y once noches. Esto es debido a que el día del patrón, San Agustín, cae en lunes.

¿Cuál es el momento más especial de los festejos?

El chupinazo de hoy es uno de los más especiales. Es un desbordamiento de alegría, sobre todo entre los más jóvenes, porque están con muchas ganas de fiesta. Es bonito ver como todas las peñas bajan a la plaza del Ayuntamiento llenas de euforia y alegría.

¿Por qué hay que visitar Fuente Álamo durante estos días de fiestas en honor a San Agustín?

Hay una oferta de actos muy variada. Merece la pena venir a Fuente Álamo. Además, aquí en el pueblo se come muy bien. La fiesta está en la calle y nadie se siente extraño. Aquí recibimos a todo el mundo con los brazos abierto. Estos días sirven también de reencuentros para muchos fuentealameros que viven fuera y regresan al pueblo. La población aumenta durante las fiestas.

Al margen de las fiestas, ¿qué retos se marca para el municipio?

Estamos en una fase de intenso trabajo. Acabamos de adjudicar un nuevo contrato de basuras, que va a suponer una mejora de servicios, se van a cambiar todos los contenedores del municipio y la limpieza va a mejorar mucho. Además, la reapertura de la residencia municipal de personas mayores es inminente, llevaba varios años cerrada. También tenemos proyectos para hacer una reforma integral de la Casa de la Cultura en los próximos meses.

La situación económica limita los proyectos.

No hay muchas obras porque no tenemos más remedio que ser prudentes y priorizar. El Ayuntamiento mantiene todavía niveles de endeudamiento muy altos que nos obligan a destinar más de 2,5 millones anuales a la devolución de prestamos y sus intereses. Esto condiciona mucho nuestra política de inversiones en obras públicas, pero si que estamos muy comprometidos con el mantenimiento y la conservación de lo existente, y la realización de aquellas actuaciones que sean prioritarias para todos los fuentealameros.