La oposición de Cehegín en bloque (Partido Popular, Ciudadanos y Cehegín por el Cambio) califica como «un atentado a la ética y a la moralidad -y lo más importante- atentar contra las reglas democráticas», la decisión del equipo de gobierno de convocar un pleno extraordinario para aprobar los Presupuestos Generales 2017 y un préstamo de 1,4 millones de euros. Y es que el equipo de Gobierno pretende hacerlo antes de que tome posesión el edil de Partido Popular tras la dimisión de su portavoz, José Soria. Ahora mismo el pleno tendría un empate a ocho ediles, por lo que las mociones elevadas al Salón Capitular serían aprobadas o revocadas con el voto de confianza que la Ley otorga al alcalde-presidente.

Una decisión que puede acarrear el bastón de mando del municipio, ya que si finalmente se lleva a cabo este pleno, la oposición está dispuesta a «seguir dialogando y no descartan otras opciones», aunque por el momento esperan la respuesta del número 5 de López Chicheri.

María Dolores Carrasco (PP), Jerónimo Moya (Ciudadanos) y Cristóbal Pintor (Cehegín por el Cambio) leían de manera conjunta un manifiesto en el que ponían de manifiesto que después de ocho meses sin presupuesto, «incapaces de negociar con la oposición; ahora convocan con premeditación y alevosía, de tapadillo, y con juego sucio, un pleno extraordinario de presupuestos», matizando que «lo hacen sin tener en cuenta el hecho de que hay concejales que han aprovechado estos días de supuesta inactividad para tomar unos días de descanso con sus familias, pero sobre todo demostrando un total desprecio por la oposición y por el diálogo».

Para la oposición se trata de un presupuesto «incrementado en cerca de un millón de euros con respecto al borrador , y llevando la operación de crédito de 1,4 millones de euros para la construcción del pabellón, por las bravas, sin negociar, y como si tuvieran una mayoría absoluta que no le han otorgado las urnas, llevando el límite de endeudamiento municipal por encima del 102%». Así lo califican como «un disparate de presupuesto, irreal y con una operación de crédito infame, que va a hipotecar el futuro de los cehegineros para los próximos quince años. Todo por cortar la cinta de un nuevo pabellón que todos queremos pero siempre que podamos pagarlo».

Los tres grupos esperan que el PSOE recapacite y dé marcha atrás, hasta la toma de posesión del nuevo concejal del PP, «y restaurar así la normalidad democrática que decidieron las urnas».