La falta de agua en los últimos meses y el calor intenso que se está registrando este verano está repercutiendo en el arbolado del término municipal de Mula, haciéndolo más susceptible a plagas y afecciones que están dañando algunas especies arbóreas. Uno de los espacios más emblemáticos del municipio, el paseo de la ermita de El Niño de Mula, que cuenta con un importante pinar ha registrado en dos de sus ejemplares la afección del barrenillo, un escarabajo perforador que ataca al pinar hasta acabar con la vida del mismo.

El escarabajo penetra en el interior del árbol y va carcomiendo su madera seca hasta acabar con él. Desde el exterior, además de presentar un aspecto grisáceo y un debilitamiento continuo, se pueden observar las perforaciones y los restos de madera que va dejando esta plaga a su paso.

Aunque por el momento no se han visto más casos, el lugar en el que se encuentra, muy visitado por turistas y muleños obliga a tomar medidas al respecto por lo que se ha tomado la decisión de eliminar estas dos unidades que se encuentran en muy mal estado y con el peligro de que sus ramas puedan caer y dañar a alguien.

Junto a estos dos pinos también se talarán otros dos ejemplares de menor porte que llevan varios años secos y que, aunque no hay peligro de que caigan, sí afean el aspecto del paseo.

La actuación podría ejecutarse antes del mes de septiembre para que en fechas de afluencia multitudinaria, como es el caso de la romería del Niño, se pueda haber solucionado el problema aunque, según determinaron técnicos de Medio Ambiente y del Ayuntamiento de Mula con un encuentro con el Hermano Mayor, no existe peligro inmediato.

En un breve espacio de tiempo, los olmos que se encuentran en la carretera RM-516 que une Mula con la pedanía de El Niño se han visto afectados por el escarabajo verde o galeruca del olmo, una especie invasora que se alimenta de las hojas de los olmos y que los deja totalmente pelados como si de otoño se tratara. Aunque la plaga no constituye una afección grave a la fisiología de los árboles, sí disminuye el vigor y actividad fotosintética y los hace vulnerables al ataque de otros patógenos. Es por este motivo por lo que se ha realizado un informe de todas las unidades que se encuentran afectadas por la galeruca y en los próximos días podría procederse a la fumigación de los ejemplares que, aunque no rebrotaran de inmediato, sí se espera que puedan presentar su aspecto habitual para la próxima primavera.

Los primeros ejemplares en mostrar un aspecto inhabitual a la época en la que estamos fueron los ejemplares más pequeños, pero en los últimos días se ha podido ver como las especies más grandes también están perdiendo sus hojas y retornándose de un color amarronado que hace pensar que se encuentran secos y dañados.

La falta de agua es una de las principales causantes de las plagas que están actualmente afectando a esta parte del arbolado, que si bien puede en parte remediarse, sí les hace más vulnerables a poder ser invadidos por cualquier otra plaga que dañe a los ejemplares en su totalidad.