El acto más emotivo de las fiestas del Sagrado Corazón de Jesús de La Hoya, que finalizaron el sábado por la noche con un gran castillo de fuegos artificiales, lo ha constituido este año el sentido homenaje de la pedanía lorquina al que fuera párroco de la misma durante 14 años, Pedro Pelegrín Navarro.

El homenajeado tiene actualmente 85 años. A pesar de ello hizo el gran esfuerzo de desplazarse desde Rincón de Seca, donde reside, hasta La Hoya para recibir tan merecido agasajo. Antes del homenaje participó, junto al párroco actual, Kenneth Chukwuca, en la misa en honor al patrón y posteriormente subió hasta el escenario del recinto ferial donde se le hizo entrega de la distinción en un acto en el que estuvieron presentes las reinas juvenil e infantil de las fiestas 2017 y las damas de honor, la alcaldesa pedánea, Conchi Martínez y el concejal Francisco Javier Pelegrín.

Durante las intervenciones afloraron sentimientos y recuerdos vividos a lo largo de los 14 años de servicio pastoral a los vecinos de La Hoya que emocionaron en varias ocasiones al homenajeado que tuvo la oportunidad de saludar a los que fueron sus monaguillos, actualmente abuelos y con nietos, lo mismo que a sus antiguos mayordomos, los primeros matrimonios que unió o algunos de los bautizos o primeras comuniones que dirigió como párroco.

Pedro Pelegrín Navarro llegó a La Hoya el 1 de noviembre del año 1967 y se marcó 14 años después. Con su presencia, la pedanía experimentó un cambio radical en todos los sentidos. Fue quien inició las fiestas patronales en honor al Sagrado Corazón de Jesús que dentro de dos años cumplirán medio siglo de vida.Construyó la nueva y actual parroquia, tras la compra de un solar que costó 60.000 pesetas. El resto del dinero lo obtuvo pidiendo por toda España además de las aportaciones que hicieron los feligreses.