Once hombres, todos ellos de nacionalidad marroquí y con edades comprendidas entre los 31 y los 52 años, se enfrentan a partir de este lunes a penas que suman casi 100 años de cárcel por secuestrar a un compatriota en 2010, a quien tuvieron retenido durante cinco días. El juicio se celebra en la sección tercera de la Audiencia Provincial, a las diez de la mañana.

Los hechos se remontan a julio de 2010 en Mazarrón, en concreto en la pedanía de Cañadas de Gallego, cuando los procesados, previamente concertados y conocedores del plan, secuestraron a la víctima cuando paseaba con un amigo por la zona. Le ataron las manos, le amordazaron y le vendaron los ojos, huyendo en dirección a la localidad de Lucena de Córdoba.

Una vez allí lo retuvieron en un piso y le sustrajeron 2.500 euros que portaba en el bolsillo, el móvil y diversa documentación. Los acusados le demandaron 12.000 euros para dejarlo en libertad.

Durante el tiempo que duró la detención, realizaron también diversas llamadas a la madre de la víctima, a la que le exigieron la entrega de 6.000 euros para dejarlo en libertad; algo que también hicieron con su amigo y que si no cumplía las exigencias lo matarían. La Guardia Civil, en el transcurso de la entrega del dinero del amigo de la víctima a los acusados, pudo detener a algunos de ellos. Días después los procesados lo trasladaron de nuevo hasta Mazarrón y lo liberaron tras haber satisfecho en Marruecos la cantidad de 6.000 euros para su liberación.

Para el fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de secuestro, por el que procede imponer a cada uno de los 11 acusados la pena de ocho años de prisión, así como la prohibición de aproximarse en 300 metros y comunicarse con la víctima durante diez años. Asimismo, deberán indemnizar a la víctima en 6.000 euros por la cantidad que recibieron finalmente en el pago del secuestro.